Más poetas de Barcelona
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Alfonso Alegre Heitzmann (Barcelona, 1955) es
poeta y ensayista. En 1987 fundó con Victoria Pradilla la revista semestral de poesía y
arte Rosa Cúbica, que juntos dirigen desde entonces. Con otros poetas fundó en
1997 Hablar/Falar de Poesía, revista hispano-portuguesa que reúne en un proyecto
editorial conjunto a algunas de las mejores publicaciones periódicas de poesía de
España y Portugal.
Entre 1989 y 1992 fue colaborador del suplemento «Culturas» del periódico Diario 16 de
Madrid. En los últimos años ha colaborado con asiduidad en el suplemento cultural del
periódico ABC de Madrid, así como en las páginas de cultura de La Vanguardia,
en el suplemento «Babelia» de El País y en la revista Letras Libres de
México.
En 1999 realizó la edición crítica de la poesía última de Juan Ramón Jiménez, que
bajo el título Lírica de una Atlántida (Círculo de Lectores, Barcelona, 1999)
reúne los cuatro libros de poemas que Juan Ramón escribió en América, durante su
exilio. En 2001 le fue concedida la Beca Octavio Paz de Ensayo, que anualmente otorga la
Fundación O. Paz de México. Como poeta, ha publicado La luz con el tiempo dentro, (Tenerife,
1993) con dibujos de Maria Girona, Sombra y Materia, (Barcelona, 1995), libro de
poemas que recoge gran parte de su producción poética escrita entre 1984 y 1991, y La
luz en la ventana (Barcelona/México, 2001), con cuatro grabados de Vicente Rojo.
ORILLA
He cruzado la noche,
el mar de niebla
sin luz ni sombra,
fiereza torpe de la nada
para llegar a ti,
orilla
donde la red al fin
me alcanza;
rumor de propio vuelo,
torrente que apenas escucho;
nunca había conocido
la oscuridad.
TU HONDO TRANSPARENTE
El lugar que tu cuerpo habita
espeja su hondura,
el tiempo en él
cada uno de tus gestos
lo señala,
lo hace adentro espacio:
«Aquí» (dice), «aquí donde vivir
es un morir transparente».
UN RECUERDO DEL SOL
Homenaje a Paul Cézanne
En todas partes un rayo
llama a una puerta oscura,
una línea, un color, en todas partes.
Nuevamente el sol
piensa en la vida.
Savia sagrada, ese rayo
es ahora tu alegría;
silencio que toca, que calla
en la madera,
que vibra, que brilla
del otro lado del umbral
de tu penumbra.
DEL AGUA Y DEL TIEMPO
Fluir del agua;
el cuenco de las manos
contiene el tiempo.
Fluir del tiempo,
el cuenco de las manos,
bebes el agua.
LA NUBE Y MIGUEL
La nube mueve el pensamiento,
oculta el sol,
llueve sobre la tierra,
la oscurece,
calla el canto del pájaro
toca su silencio y pasa,
moja tus cabellos,
la nube,
la brisa en tus ojos,
las ramas desnudas
de los árboles...
Deja que la lluvia caiga.
(Miguel Bastos, in memoriam)
LÍMITE
Yo camino en su nada
como si el tiempo
se hubiera detenido,
como si sombra fuese
la única palabra,
donde todo latiera;
yo camino en su límite,
su morada.
De la nada la flor
que ahora nace,
y el pájaro que la canta
y en ella está
su luz te dice y estás tú en ella.
Entre el alba y la aurora,
yo camino en su sombra.
LA EVIDENCIA DEL ÁNGEL
Tu sonrisa
es el fin de una tormenta,
la evidencia del ángel
en la tierra pedregosa,
la sombra del alma,
una nube,
la rama que el aire mueve,
la transparencia;
un ramo de flores,
una vasija encendida,
la sombra de tus ojos;
el río nocturno, su curso,
su murmullo,
tu cuerpo oscuro,
el agua de la noche
que ahora bebo;
el invierno,
el árbol desnudo
en la honda transparencia
del aire,
el fin de una tormenta,
tu sonrisa,
la evidencia del ángel.
ALMENDRA
Fulgor tan blanco,
la nieve es flor
del árbol más desnudo,
primavera de luz
que vienes en invierno.
LA LUZ EN LA VENTANA
A José Manuel Blecua Teijeiro
Un resplandor de luz, una ventana;
reflejo es de un hogar. Ardiente esfera,
la casa guarda dentro la postrera
lumbre del día en la memoria humana.
Su brillo hace la noche más liviana,
pues de las sombras cura la ceguera;
semilla de esperanza cuando afuera
otro ser la vislumbra muy lejana.
Dos soledades arden en su llama;
la del que adentro mira el universo
en las sombras del fuego de la estancia,
la del que lejos sueña cuanto ama,
cuando en lo oscuro de la noche inmerso
un resplandor distingue en la distancia.
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