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Poesía de la claridad
Sospecha de la luz
María Navarro
Miguel Gómez ediciones, Málaga 2013
Es María Navarro una poeta oculta a pesar de que ha publicado con este seis libros de poesía y sus poemas están presentes en varias antologías a lo largo de más de veinte años pero pocas veces aparece en el panorama crítico de este país que se centra siempre en los mismos nombres sin tener en cuenta otros que van haciendo su obra a veces en un anonimato injusto
Desde sus primeros títulos Destrás de las ventanas.Cuentos para Baltasar (1989), La voz escrita (1993) o En esta costa noble de azules asesinos (1996) la poesía de esta poeta y psicoanalista malagueña se caracteriza por el uso de un lenguaje claro, conciso, riguroso expresando un lirismo siempre controlado y sobrio además de por una presencia viva y constante de elementos de la naturaleza como el mar, elementos que dan vida y color a muchos de sus poemas. Estos elementos de la naturaleza se conjugan con la expresión de vivencias como el amor, la soledad o la reflexión sobre la escritura o sobre la vida y la dificultad de vivirla en contacto con el otro. naturaleza y vida, humanidad y mar que es la aspiración hacia la universalidad, como lo es la poesía de Navarro.
Sospecha de la luz se divide en tres partes, en la primera ,”Vivir como los pájaros” aparece la celebración de la vida, del amor y de la escritura que se hace difícil cuando el amor escapa o se esconde “un reguero de letras sobre la alfombra/ se derrama.Las rescato y junto./Mientras, en otra simetría escribo en orfandad”. La vida también es el pasado, el recuerdo y el dolor aprendido “Desde el insomnio es un día de 1936/ en la voz de mi madre”. Los poetas, y las poetas también, hay un momento en el que se paran a reflexionar sobre lo que han vivido en su infancia y lo que forma parte también de su acervo aunque no lo hayan vivido directamente. Los recuerdos de la madre que pasan a ser nuestros recuerdos.
En la segunda parte “Lo breve y lo sereno” la naturaleza se hace más presente y los poemas son brevísimos. Brevedad, síntesis cercana al aforismo, flechas que apuntan sin llegar a un destino que el lector inventa. Cada lector inventará una diana diferente y en todas ellas existirá la poesía que llenará de luz las sombras que todo lector guarda en su memoria.
La tercera parte se titula “Cartas en destino” y es , como su título indica, poesía en forma epistolar. A través de veintidós poemas que comprenden un año completo, un recorrido por el tiempo vital y el tiempo externo , el que marca el calendario, la voz poética establece un diálogo con el otro, con el objeto se su amor, sin olvidar nunca la escritura “Ese es el lado donde el dibujo del paisaje interior/y la escritura tienen el mismo litoral.” El amor que es vivencia exacta de un tiempo compartido y fructífero.
En esta parte la voz se hace más íntima y la luz, que es el hilo conductor de todo el poemario, estalla en mil significados y se alía con el tiempo inexorable que transcurre.
Poesía de verdad la que nos ofrece María Navarro en este libro en el que afirma, entre otras muchas cosas, “que siempre hay una vida paralela aún por conocer”.
M Cinta Montagut
© TBR 2013
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